Teotihuacán, Estado de México.- El alcalde Mario Paredes de la Torre inauguró este 21 de marzo la edición 2025 de la Feria Internacional de la Obsidiana (FIO), un evento que reúne a 170 artesanos —principalmente locales, pero también de otras regiones— en un escenario que busca posicionar la artesanía teotihuacana en mercados internacionales. "Las piezas tienen precios accesibles, pero nuestro objetivo es que cada creador logre exportar", destacó el edil, quien admitió que el evento aún depende de subsidios municipales, aunque genera derrama económica para expositores de gastronomía, bisutería y arte tradicional.
Infraestructura y transporte
Aunque el recinto ferial permanente sigue en fase de proyecto —dificultado por los costos elevados cerca de la zona arqueológica—, el gobierno avanza en gestiones para conectar los talleres artesanales con el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) mediante una estación de tren, en coordinación con el INHA y los tres niveles de gobierno.
Ritual de Mictlantecuhtli
La ceremonia de apertura incluyó una representación dramatúrgica de Mictlantecuhtli, deidad azteca de la muerte, recordando su papel como eje de la cosmovisión mesoamericana donde "vida y muerte son complementos". En materia de seguridad, la feria contará con operativos de la Policía Municipal, Estatal, Guardia Nacional y un inédito stand de la SEDENA dentro del recinto.
Apoyo político y proyección cultural
El evento congregó a funcionarios locales, diputados, líderes sociales y al representante de la gobernadora Delfina Gómez Álvarez. Paredes enfatizó que, pese a los retos logísticos, la FIO-2025 consolida a Teotihuacán como epicentro de arte y tradición, mientras trabaja en convertirla en un modelo autosustentable que beneficie directamente a las comunidades creadoras.
Con obsidiana como hilo conductor, la feria se erige como puente entre el legado prehispánico y las oportunidades económicas del siglo XXI.